Los pedidos se dispararon en el laboratorio danés Bavarian Nordic, el único que fabrica una vacuna ya homologada contra la viruela del mono, pero sus responsables están convencidos de poder satisfacer la demanda.
”La homologación (de las autoridades sanitarias estadounidenses) recibida en 2019 (...) se ha convertido de repente en muy, muy pertinente para la salud internacional”, dice sonriente su vicepresidente Rolf Sass Sørensen en la sede de la empresa, en el puerto de Copenhague.
Sorprendidos por la propagación de la enfermedad fuera de los once países africanos donde era endémica, Sass Sørensen asegura que están pudiendo absorber la demanda a pesar de que solo cuentan con una fábrica de producción.
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”Con la demanda actual, podemos fácilmente abastecer el mercado mundial. Tenemos algunos millones de dosis a granel, podemos meterlas en frascos y asegurar que la epidemia actual sea tratada”, explica a AFP.
Bavarian Nordic dispone de una capacidad de producción anual de 30 millones de dosis en su fábrica en el norte de la capital danesa. Su vacuna antivariólica es un suero de tercera generación, una vacuna viva que no se replica en el organismo humano.
Se comercializa con el nombre de Imvanex en Europa, donde está autorizada desde 2013, de Jynneos en Estados Unidos y de Imvamune en Canadá.
Numerosas reservas de vacunas contra la viruela del mono
El tratamiento requiere de dos dosis e inicialmente estaba prescrito para tratar la viruela en adultos, una enfermedad que se considera erradicada desde hace 40 años.
Hace tres años, obtuvo la luz verde en Estados Unidos para usarse contra la viruela del mono y el laboratorio trabaja actualmente para expandir su homologación europea a esta variante concreta.
Según Sass Sørensen, la vacuna está “en stock en numerosos países” y puede ser aplicada antes o después de que el paciente haya estado expuesto a la enfermedad.
”Si te vacunas algunos días después de haber estado expuesto, puedes igualmente quedar protegido”, señala. En el seno de la Unión Europea, la autoridad sanitaria Hera, creada a raíz de la pandemia del COVID-19, adquirió casi 100.000 vacunas que serán puestas a disposición de los 27 países miembro, además de Noruega e Islandia.
Las primeras entregas se esperan a finales de junio para los países prioritarios, indicaron las autoridades europeas.
Estados Unidos anunció también el aumento de sus reservas con 500.000 dosis suplementarias, además de 100 millones de unidades de otra vacuna antivariólica del grupo francés Sanofi. Canadá y Dinamarca hicieron lo mismo.
Vacunación masiva desaconsejada
Más allá de estos anuncios, el laboratorio danés protege celosamente la nacionalidad de sus compradores. ”No revelamos los nombres de los países, pero tenemos pedidos del mundo entero: Estados Unidos, países europeos, asiáticos, de Oriente Medio”, asegura Sass Sørensen.
El importe de los contratos no se ha hecho público pero, para Bavarian Nordic, suponen unos ingresos que le han llevado a aumentar cuatro veces en tres semanas sus previsiones de 2022.
A pesar del aumento exponencial de casos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no recomienda la vacunación “masiva” por ahora.
En Francia, la autoridad sanitaria recomendó administrar una sola dosis a las personas que sean contactos de riesgo y que hayan sido vacunadas contra la viruela antes de 1980, salvo para quienes sufran inmunodepresión.
Normalmente benigna, la enfermedad suele desaparecer espontáneamente tras dos o tres semanas de síntomas gripales seguidos de erupciones cutáneas.
Desde el 1 de enero al 15 de junio, la OMS ha detectado más de 2.100 casos y un deceso en 42 países. Europa está en el foco de propagación, con 1.773 casos confirmados, un 84% del total mundial.
Además del antivariólico, Bavarian Nordic produce vacunas contra la meningoencefalitis de garrapata, la rabia, el ébola y está desarrollando fórmulas contra el COVID-19 y virus respiratorios sincitiales.
