En medio de sus idas y vueltas legales y sentimentales con Mauro Icardi y L-Gante, Wanda Nara apostó por un nuevo emprendimiento. Recientemente, la empresaria anunció en sus redes el lanzamiento de su propia línea de indumentaria inspirada en el nombre de su alter ego: Bad Bitch.
Esta nueva incursión no solo incluye ítems como camisetas y tops, sino también complementos como termos y gorras. Los mismos están exhibidos en la página web de la marca, así como sus precios, que varían según el producto.
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Tal como se ve, los productos de mayor valor son las remeras deportivas. Todas tienen un costo de 140 mil pesos. Vienen en varios colores y versiones, con estampados alusivos a los gustos de la blonda, como el de un lazo que recuerda al del personaje Hello Kitty y clubs de fútbol como el Inter de Miami y el París Saint-Germain.
Luego, hay modelos de gorras para elegir, entre varias tonalidades, todas con la “W” como único diseño. El precio único es de 50 mil, mientras que los termos y botellas tienen un costo que oscila entre los 70 y 80 mil pesos, dependiendo del modelo.
Este nuevo proyecto fue lanzado en medio de los primeros rumores de separación con L-Gante, pero utilizó algunas prendas cuando viajaron juntos a Paraguay y Chile. Fue una estrategia verdaderamente ingeniosa, considerando el tráfico de usuarios que ingresan a sus redes, especialmente, en medio de los escándalos y polémicas que la rodean.
Se viralizó una foto hot de la mamá de Wanda Nara que dio que hablar en las redes
Nora Colosimo, la mamá de Zaira y Wanda Nara, sorprendió a sus seguidores de Instagram con una foto muy particular que muchos consideraron de altísimo voltaje. Se trata de una selfie en la que se la ve haciendo trompita y luciendo los glúteos tonificados, ya que el espejo expuso su espalda entera.
La mujer, que años atrás fue duramente criticada por vender Nu Skin, se encuentra en Italia y muchos usuarios sospechan que se instaló en una de las casas de su hija mayor. Allí se da la buena vida, recorriendo lugares y hasta visitando centros de belleza.
Colosimo es un sostén fundamental para Wanda, y fue clave en el tramo final de su matrimonio con Mauro Icardi. Si bien al principio no quería que se divorciaran, luego se filtraron audios en el que se le escuchó detallar algunas maldades que el jugador le hacía a su esposa, como esconderle el pasaporte.
